Autora: M. Belen Marqués Alvarez.
En éste, mi primer artículo en la revista, voy a escribir sobre las metodologías activas de aprendizaje y su aplicación en las enseñanzas de Formación Profesional.
Veamos en primer lugar qué entendemos por metodologías activas, cuáles son y una breve explicación de cada una de ellas.
Definimos las nuevas metodologías de aprendizaje como aquellas que sitúan al alumno en una posición activa en la que adquiere el protagonismo de su propio aprendizaje, es decir, se centran en el alumno y en su capacitación en competencias propias de un módulo concreto.
Con las estrategias que utilizan estas metodologías el alumno construye su propio aprendizaje y en este aspecto es en el que verdaderamente se diferencia de la metodología tradicional en la que el alumno es receptivo del aprendizaje.
Otras características que definen las metodologías activas son:
– Los alumnos aprenden trabajando en grupos en los que se organizan a sí mismos asumiendo responsabilidades individuales y de grupo. Los alumnos de Formación Profesional aprenden así a trabajar en equipo, a organizar su tiempo y esfuerzo para alcanzar un desempeño profesional colaborando con otros compañeros para alcanzar objetivos comunes.
– El trabajo realizado en el aula se contextualiza en situaciones reales de la vida, acercando al alumnado al mundo laboral. Los alumnos de FP desarrollan así competencias necesarias para su futura práctica profesional.
Las ventajas que ofrecen estas metodologías para los alumnos, además de facilitar el aprendizaje, son la motivación y participación en el proceso de aprendizaje.
Algunas de estas metodologías son:
* Aprendizaje cooperativo. Consiste en organizar las actividades del aula de forma que los alumnos trabajen en grupos para alcanzar objetivos comunes responsabilizándose de su propio trabajo y asumiendo responsabilidades para con el resto de miembros del equipo. La principal ventaja de esta forma de trabajar en el aula es que permite al profesorado atender la diversidad.
El procedimiento para aplicar el aprendizaje cooperativo en el aula pasa por unas fases que son: diseñar los agrupamientos y distribuir a los alumnos, organizar el contexto de cooperación estableciendo normas y distribuyendo roles a cada componente del grupo; se deben diseñar a continuación las situaciones cooperativas, programar secuencias didácticas y por último evaluar la cooperación. (Fases de la guía de Francisco Zariquiey para COOPERAMOOC de educaLAB moocINTEF)
* ABP- Aprendizaje Basado en Proyectos. Consiste en realizar una serie de tareas planificadas y dotadas de los recursos necesarios cuyo objetivo es dar respuesta a una pregunta o solución a un problema y obtener como resultado un ‘Producto Final’. El alumno se implica en procesos de creación e investigación trabajando cooperativamente para conseguir un producto final que responda a la pregunta o problema planteado y que presentará ante otros miembros de la comunidad educativa o ajenos a ella. Si el proyecto presta un Servicio a la Comunidad se denomina Aprendizaje Servicio y con él el alumno adquiere conocimientos, habilidades, actitudes y valores.
* Flipped Clasrroom. Se conoce también como ‘clase invertida’ o clase al revés’. Es un modelo pedagógico que traslada el trabajo de determinados procesos de aprendizaje fuera del aula y utiliza el tiempo de clase para facilitar y potenciar otros procesos de adquisición y práctica de conocimientos dentro del aula. El profesor se encarga de buscar y elegir contenidos, o crearlos, bien en formato documento, infografía, vídeo o presentación y los comparte con el alumnado que los visualiza fuera del aula. El trabajo que se realiza en el aula después sirve para afianzar el aprendizaje. Este modelo permite la combinación de la metodología del aprendizaje cooperativo y el aprendizaje por proyectos. El profesor puede prestar más atención a la diversidad. También fomenta la necesidad de compartir los materiales elaborados con otros profesores. Además, tiene la ventaja para el alumnado de que puede acceder sucesivas veces, y cuando lo precise a los contenidos creados por el profesor.
* Gamificación. Es una estrategia de aprendizaje que introduce la mecánica de los juegos en el aula con el fin de conseguir mejores resultados. Trata de facilitar la interiorización de conocimientos de forma divertida. Consigue motivar al alumno incentivando el ánimo de superarse intentando conseguir puntos, escalas de nivel, premios, clasificaciones, desafíos o misiones.
Es un momento perfecto para introducir poco a poco estas metodologías en el aula porque disponemos de recursos tecnológicos que pueden ser nuestros aliados perfectos en el proceso. Por supuesto que las nuevas tecnologías, ordenadores, tablets, móviles, internet, redes sociales, nos van a facilitar la innovación metodológica en los procesos de enseñanza aprendizaje.
El Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y de Formación del Profesorado ofrece cursos de formación para profesores en distintos formatos (Cursos online, MOOC, NOOC, SPOOC) además de ofrecernos la posibilidad de compartir recursos en Procomún (Red de Recursos educativos abiertos).
Twitter: @BelenMarquesAlv
