Autora: Inés Olivera Crego.
¿Preparados para el descanso más cálido del año? A finales de mes se celebra el solsticio de verano y aunque para nosotros es el inicio del verano, en otras tradiciones el solsticio de verano marca la mitad del verano. Una conocida marca sueca de muebles celebrará pronto la liquidación Midsommer, mientras que según la Medicina Tradicional China, el verano comenzó el 5 de mayo y terminará el 20 de julio.
Durante esta estación, predomina el elemento Fuego, que relacionan con la alegría, el sabor amargo y con los órganos corazón e intestino delgado. Y como todo, un defecto o un exceso de fuego, puede provocar síndromes como insomnio, delirios, astenia mental y olvidos. El exceso amargo de las ensaladas de hierbas amargas como la escarola, el diente de león, la rúcula o las endivias, debería compensarse con frutas o algún aliño agridulce. Las carencias de fuego más relacionadas con la tristeza que nos puede entrar cuando se acaba el verano se pueden compensar con una planta típica del verano: el hipérico.
Hipérico: Hipericum perforatum
El hipérico es una de mis plantas favoritas, pertenece a la familia de las Hypericacea o Guttiferae, florece ahora, para estar radiante en San Juan. Su nombre: Hipérico, podría traducirse como planta inimaginable (Super-Imagen) por la cantidad de propiedades que tiene y su apellido, perforatum, se debe a que las hojas presentan pequeñas vesículas de aceite que dan a la planta un aspecto de estar agujereadas o perforadas. Se la relaciona con un montón de cultos y recetas ancestrales. Contiene aceites esenciales, taninos rutina e hipericina, que le confieren propiedades como: cicatrizante, antidepresivo
Sus hojas son Por los agujeros de sus hojas, se consideró que sería bueno para las heridas y en algunas zonas se le llama Hierba de los soldados, en
efecto, es un buen cicatrizante. Quizá por sus aceites esenciales que estimulan la circulación y por tanto la llegada de las plaquetas o quizá, por los taninos que resultan tóxicos para muchas bacterias, o por la combinación de ambos, así, mientras cicatriza, contribuye a que la herida no se infecte.
Debido a su color, amarillo intenso, se le relacionaba con el hígado, con la bilis, y en efecto, se administra con éxito para afecciones biliares, esta función se debería a sus taninos (sustancias amargas) También por el color de las flores (amarillo) y el color del macerado de la planta (rojo), se creía que conservaba el fuego o calor del verano y actualmente se receta para tratar la depresión.
¿Qué podemos preparar? En otra ocasión os hablé de los beneficios de la infusión, para el caso de las depresiones. Hoy me voy a centrar en los beneficios de esta planta para la piel y vamos a preparar un macerado de hipérico.
Para ello hay que recolectar una buena cantidad de planta, sacudirla un poco para dar un impuso a los bichillos que se estén alimentando de ella e introducirla en un recipiente de VIDRIO TRANSPARENTE, que vamos a llenar con aceite, de oliva virgen extra u otro, como el de almendras que sea bueno para la piel. Cuanto más natural y menos procesado sea el aceite, mejor, no os recomiendo utilizar un aceite desodorizado o que haya sido extraido con calor, ya que pueden eliminar vitaminas y alterar las propiedades del aceite. Dejaremos macerar la planta en el aceite durante al menos 15 días. “Las brujas” decían que debía dejarse hasta un mes completo, Sol y Luna para que el macerado adquiriera todas las energías de los dos cuerpos celestes. En mi opinión, el Sol es necesario para que la planta se oxide un poco y de ese color rojizo al macerado.
La noche de San Juan es el momento óptimo de recolectarla, sobre todo si coincide con luna menguante ya que se supone que la fuerza de atracción que ejerce la luna sobre el mar y provoca las mareas, será la misma que se ejerza sobre la savia de las plantas, incrementando así la cantidad de principio activo. Por otro lado, la noche de San Juan marca el día más largo, en el que estas plantas han tenido más tiempo de producir los aceites esenciales y taninos clave para protegerse ellas mismas del sol y luego, a nosotros.
Este macerado, como la planta, tiene propiedades cicatrizantes, y es excelente en el caso de quemaduras, ya sea solares o accidentales en la cocina. Pero ojo, como los cítricos, es fotosensibilizante, es decir, por el día podría provocarnos quemaduras solares, por lo tanto, debe utilizarse sólo por la noche.
Precauciones:
Además de tener el cuidado de emplear el macerado sólo por las noches por la capacidad fotosensibilizante de la hipericina, debemos prestar atención a algunas interacciones con otras medicinas como: antidepresivos, anticonceptivos, anticoagulantes (como el ácido acetil salicílico de las aspirinas o el adiro), tratamientos para evitar el rechazo tras un trasplante o para tratar infecciones víricas como el SIDA. Además algunos animales han reducido la secreción de leche tras su consumo, por lo que está totalmente desaconsejado en mujeres lactantes. Por lo tanto, en el caso de que tuvieras interés en consumirla, consulta con tu médico para conocer si hay alguna interacción con un tratamiento previo.
Finalmente, me gustaría que evitarais las confusiones con algunas plantas “parecidas”, por ejemplo, la hierba de Santiago, Jacobaea vulgaris que tiene las flores amarillas, un porte parecido al del hipérico, cercano al medio metro. Sin embargo, pertenece a la familia de las asteráceas, como las margaritas y suele florecer un poco más tarde, en torno al 15 de Julio, el día de Santiago. Contiene muchos alcaloides, lo que la hace tóxica para los animales y en tratamientos largos… porque tradicionalmente se ha utilizado para tratar problemas circulatorios y provocar la menstruación y de forma tópica en picaduras de abeja. Recientemente se está investigando su papel en la división celular para generar un tratamiento contra el cáncer.
Por último, el diente de león, Taraxacum officinale, tiene las flores amarillas y las hojas de bordes dentados formando una roseta en el suelo. Es una planta herbácea, y como tal, mide sólo unos 20 centímetros, aunque quizá, lo que más os ayudará a recordarla, es que es la planta que en unos meses dará “abuelillos” esas esferas blanquecinas que se soplan pidiendo un deseo. De sus propiedades depurativas, diuréticas y laxantes se han llegado a escribir libros y espero poder presentárosla con mas calma en una próxima edición;)
Mientras tanto, disfrutan del verano y sed felizmente naturales.
Fotos: Pixabay.
