Autora: Olga Rodriguez Borrego.
A 23 kilómetros al oeste de la ciudad de Palencia se encuentra la Laguna de La Nava. Esta Laguna, también conocida con el nombre de Mar de Campos, es una extensión de 300- 400 Has. dividida en dos por la carretera que une Mazariegos con Fuentes de Nava, con una profundidad media de agua de unos 35 cms.
Originalmente era una laguna natural de origen estepario, de gran extensión, que podía llegar a tener 5000 Has en los años lluvioso; se desecó en los años 60, pero gracias al esfuerzo de algunas organizaciones y en colaboración con la Consejería de Medio Ambiente, se inició un proyecto de restauración y recuperación.
Actualmente es una laguna que se llena de agua todos los otoños con agua procedente del Canal de Castilla, gracias a un sistema de diques y husillos, y al acondicionamiento de la red hidráulica, imitando el ciclo natural de las lagunas, se empieza a llenar en octubre y permanece con agua en otoño invierno y primavera, hasta que termina la época de cría de las aves. Durante la época estival permanece seca, iniciándose en octubre un nuevo ciclo de llenado.
Este proyecto de restauración ha supuesto la recuperación de los valores faunísticos que antiguamente tenía la laguna; hoy en día es uno de los humedales más importantes de Castilla y León y uno de los espacios más importantes desde el punto de vista faunístico, siendo junto con las Lagunas de Villafáfila los dos espacios donde invernan la gran mayoría de las aves acuáticas en nuestra comunidad. Precisamente en estas fechas de invierno es donde La Nava se manifiesta en todo su esplendor.
Se han catalogado más de 200 especies de aves diferentes, llegando a haber más de 20.000 ejemplares, fundamentalmente diferentes especies de patos y gansos, ofreciendo un precioso espectáculo cuando sobrevuelan la laguna, en sus desplazamientos diarios.
En la época invernantes, es zona de importancia internacional para el ánsar común Anser anser con concentraciones máximas de hasta 10.000 individuos y otras muchas especies de patos, como pato azulón, cercetas, pato silbón o pato cuchara, se cuentan por cientos o miles.
En la primavera y verano, cuando las aves invernantes migran, la laguna se llena de aves limícolas, que son aves pequeñas, de picos y patas largas que viven en zonas ligeramente encharcadas y se alimentan de pequeños invertebrados que encuentran rebuscando con el pico en el fango; el ejemplo más conocido de estas aves son las avefrías.
Los valores faunísticos le han valido a la Laguna de la Nava, para ser declarada Espacio Natural. Este Espacio se llama Espacio Natural de La Nava y Campos de Palencia, además de ser un Espacio Protegido de la RED NATURA 2000 ya que está reconocido como LIC (Lugar de Interés Comunitario) y es un Sitio RAMSAR (Área recogida en el convenio Ramsar), convenio que recoge los humedales de importancia internacional como hábitat de aves acuáticas.
Los meses más recomendables para la visita son entre noviembre y febrero, que es el momento donde hay más aves invernantes. Existe una Centro de Recepción de visitantes donde aprenderéis muchas cosas sobre el lugar, situado en fuentes de Nava. Ofrece interesantes recursos que te servirán para entender mejor los procesos ecológicos que se dan en la laguna, y hay una cámara que podréis manejar que te ofrece una imagen en tiempo real de la Laguna y podrás observar muy de cerca las aves que están allí en ese momento.