Autor: Diego Alonso Santamaria.
El curso pasado publicamos un artículo sobre el uso de los gráficos de radar en el deporte y, más concretamente, en el fútbol. (Ver enlace).
Desde el punto de vista educativo, resulta admirable cómo este tipo de gráficos, que no suelen ser estudiados debido a su dificultad de creación, en realidad son utilizados con total naturalidad por los más jóvenes. Este hecho subraya una vez más que los intereses del alumnado pueden ser un perfecto motor del aprendizaje.
Ciertamente, este tipo de representaciones se están volviendo cada vez más populares, fomentado por el uso que videojuegos y medios de comunicación están haciendo de ellas. Sin ir más lejos, el videojuego de fútbol por excelencia, FIFA 21, utiliza este tipo de gráficas para facilitar al usuario la comparación de jugadores.
La razón de esta incipiente popularidad reside en la sencilla interpretación de este tipo de gráficos ya que, de manera muy visual, se puede saber si un jugador es más completo que otro observando el tamaño de sus polígonos, o si uno destaca más en una faceta que otro por la posición del vértice en el radio correspondiente.
Errores más comunes en la representación de gráficos de radar
Resulta aparentemente sencillo crear este tipo de gráficos, ya sea en una hoja de papel o utilizando el programa Excel a través de la pestaña Insertar gráfico. Sin embargo, existen ciertos errores que son comunes en muchas publicaciones o medios de comunicación. Aprendamos de ellos:
- No elegir las variables adecuadas a la situación: Siguiendo con el ejemplo del videojuego, las variables representadas son las mismas para cualquier independientemente de su posición. Por ejemplo, en la imagen que se ve a continuación, podemos ver una comparación entre un jugador de campo y un portero siguiendo las variables que miden al primero, lo que conlleva una clara desventaja para el polígono del guardameta. En conclusión, su radar no muestra con objetividad la importancia que tienen en el juego.
Además, en el caso de que se quisiese realizar esta comparación ¿No sería más justo utilizar las variables que definan a un portero? Y es que, si uno se para a pensarlo, es más común que un jugador de campo se ponga de portero tras la expulsión de este, a no que un guardameta circule por todo el terreno de juego.
- Definir un sistema de colores: Siempre que se utilicen colores en un gráfico, debe referenciarse de algún modo para el que lector lo entienda. Sin embargo, si volvemos al FIFA 21, la explicación de su sistema de colores ha sido omitida, haciendo imposible para el lector de este artículo saber a quién corresponde cada polígono:
(Nota: aprovecho esta imagen para señalar que, en este ejemplo, el videojuego sí que corrige el fallo que hemos remarcado en el segundo punto, representando a los porteros con variables propias de su posición).
La solución de este error es incluir una explicación del sistema de colores utilizado, ya sea de forma escrita mediante una pequeña leyenda, o de una manera más visual. Por ejemplo, la revista ZONA AZUL, que el equipo de baloncesto Hereda San Pablo Burgos reparte a todos sus aficionados, contiene en cada partido un gráfico de radar en el que relaciona el color del polígono con el color con el que se pinta el escudo:
CONCLUSIÓN FINAL:
En conclusión, los gráficos de radar han llegado para quedarse, pues resultan una representación de datos muy visual y atractiva para el espectador. Sin embargo, y como en cualquier estudio estadístico, se debe ser muy metódico a la hora de crearlos para no caer en fallos y, por tanto, induzcan a error y a falsas impresiones al lector.
En próximas publicaciones explicaremos cómo crear de forma correcta esta representación de datos…
Escrito por:
Diego Alonso Santamaría