Autora: Azucena Esteban Alonso.
Me siento muy afortunada de pertenecer a este grupo de profesionales que comparten su bagaje docente con la comunidad educativa a través de la “Revista Digital del Portal de la Educación”. El recorrido de la misma es ya amplio, contando con seguidores asiduos y un alto índice de lectores. Por ello, se persigue no sólo mantener la calidad alcanzada hasta el momento sino mejorar con cada nuevo curso escolar, con cada nuevo artículo.
Haciendo eco de estas premisas, desde la sección “Familias y Escuela”, retomamos un nuevo camino, de forma que continuaremos adentrándonos en distintas temáticas relacionadas con la participación educativa, la configuración de la escuela como una comunidad, las relaciones entre el ámbito familiar y escolar, compartiendo pautas para fomentar la colaboración de las familias en el aula y/o el centro educativo, etc.
¿Cuál es el punto de partida de esta sección?
Creemos en una escuela abierta al entorno. La escuela, alejada de la realidad, descontextualizada, camina solitaria hacia un rumbo incierto que más bien se relaciona con su propio fracaso social. Creemos en una escuela abierta a la realidad familiar. La escuela, sin la familia pierde su espíritu y su alma, porque la familia es la esencia del niño que acogemos entre las paredes escolares.
Creemos en una escuela que ayude a crecer, no sólo al niño sino a toda la comunidad educativa, convirtiéndonos en motor de cambio social. Creemos, por tanto, en una escuela activa, reflexiva con el momento en el que nos encontramos, impulsora de transformaciones, por pequeñas que éstas sean. Aunemos esfuerzos para avanzar juntos.
La escuela es algo más que un conjunto de procesos de enseñanza-aprendizaje conceptuales donde yo, el maestro, tengo muchas cosas que decir y los niños (y sus familias) muchas que escuchar, aprender y callar. No nos engañemos, la sociedad ha cambiado. ¿Cuándo va a hacerlo la escuela? ¿Cuándo el rol docente?
Ciertamente, no se trata de un camino sencillo. Yo misma, lo he experimentado en algunas ocasiones. Sin embargo, no hay que perder el rumbo. Los procesos de cambio son complejos. Hay que arriesgarse, luchar, reflexionar y, bastantes veces, volver a empezar. Barajamos las diferentes oportunidades que nos ofrece cada nuevo sendero, aprovechando el enriquecimiento que supone la relación con la comunidad educativa, en especial, con las familias.
¿Cuál es el enfoque de los artículos de esta sección?
Estas líneas conceptuales o ideas de base se abordan desde la experiencia docente en las etapas de infantil y primaria y, como directora de un centro rural. Así pues, los artículos de esta nueva fase persiguen como finalidad no tanto proporcionar términos o detalles teóricos sino compartir experiencias, análisis y reflexiones en torno a la realidad educativa actual, vivenciadas de primera mano.
Todo ello, con la esperanza y el placer de poder ayudar, por pequeña que pueda resultar esta ayuda, a quien lea las aportaciones que se recogerán a lo largo de los diferentes artículos de este curso escolar que comienza.
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