Autor: Florentino Lomillo Álamo.
Florentino Lomillo Álamo. Fundador escuela municipal de ajedrez de Burgos, monitor de ajedrez, árbitro de ajedrez, jugador de ajedrez, campeón absoluto de Burgos en dos ocasiones, subcampeón de Castilla y León absoluto en 2010. Profesor
Campeón por equipos de León absoluto con el equipo Dama Park 2019/2020
“El ajedrez es peor que la vida”
Florentino Lomillo
Bienvenidos de nuevo a esta serie de artículos de ajedrez.
Iniciamos este curso 20/21 – marcado por las circunstancias que pretenden cambiarnos el modo de vida-, con la humilde pretensión de contar una historia que a buen seguro nos va a dibujar una sonrisa en la cara. Historia que podremos disfrutar muchísimo más con los conocimientos que ya hemos adquirido de ajedrez. Que no se preocupe nadie que no sepa de ajedrez demasiado porque todos podemos reírnos y aprender con ella.
Hoy vamos a revivir más que una anécdota, una fábula, como las de Samaniego, con moraleja final, y además desarrollo y remate histriónico. Realmente una joya para disfrutar, delante de un tablero a ser posible, y con un maestro de ceremonias que remarque la exageración desmesurada de la personalidad del protagonista como me ocurrió a mí cuando me la contaron.
Tenemos que situarnos en el primer tercio del siglo XlX, con el apogeo de los cafés a los que acudía el ambiente bohemio de las ciudades para entre otras cosas, jugar al ajedrez.
El barón de Münchhausen.
El barón, conocido más por fanfarrón que por su supuesto título nobiliario, se encontraba comentando una partida de ajedrez en voz alta, con su habitual vehemencia y búsqueda de protagonismo, en el archifamoso café de La Régence en París, meca del ajedrez en el continente en esa época.
Acostumbrado a que la gente a su alrededor le prestara atención, escuchara e interpelara gracias a su proverbial verborrea, advirtió la presencia de un joven que literalmente no le hacía ningún caso a pesar de estar presente en el grupo. Esta actitud pasiva que impedía vanagloriarse al noble, enardeció al barón que le propuso jugar una partida de ajedrez, sin darle opción a decir que no, sin darle más opción que la de sentarse y mover madera con semblante asustado y manos temblorosas.
La partida, en la que el barón llevaba las piezas blancas, se desarrolló así:
1.e4 d5 2.e5 d4 3.c3 f6 4.exf6 dxc3 5.fxe7 cxd2+ 6.Axd2 Axe7 7.Cf3 Cc6 8.Cc3 Cf6 9.Ce2 Cd7 10.Cfd4 Cce5, en este momento el barón sonrió porque pensaba que iba a ganar la dama y jugó 11.Ce6, pero con sorpresa vio que su adversario respondía 11…Cd3++, jaque mate
El barón se repuso al instante de este inesperado varapalo y obligó a jugar una segunda partida a su silencioso rival, pidiéndole además repetir con blancas, dado que había conseguido ganarle el primer envite.
La segunda partida aconteció como sigue:
1.e4 d5 2.d3 e6 3.Cf3 Cc6 4.Ag5 Ab4+ 5.Re2 Dd7 6.Cc3 Cf6 7.a3 h6 8.Ah4 Aa5 9.e5 d4 10.Ca4 Ch5 11.Cc5 Cf4++
Y de nuevo el barón tuvo que inclinar su rey ante el desconocido.
El café entero se agolpaba ya para ver la debacle del barón, y éste herido en su orgullo solicitó jugar una tercera partida, de nuevo con blancas.
1.e4 d5 2.d4 e5 3.c4 f5 4.f4 c5 5.exf5 dxc4 6.dxc5 exf4 7.Axf4 Axc5 8.Axc4 Axf5 9.Axb8 Axg1 10.Axg8 Axb1 11.Txb1 Txg8 12.Txg1 Txb8 13.Dxd8+
Y el desconocido jugó…
13…Rxe1…
Jugada ilegal, que el barón reclamó a su rival. El joven espetó al barón que había realizado el mismo movimiento que él.
– ¡Qué ridiculez!. ¿No sabéis distinguir una dama de un rey?
– Francamente no, -indicó el joven- Lo único que he hecho ha sido copiar sus jugadas
El café fue unánime en la carcajada. El prestigio del barón estaba en juego y el barón tiró de su verborrea.
-¡Realmente es asombroso!, dijo gritando para acallar la algarabía general. Una persona que casi no sabe ni mover las piezas consigue ganar a un jugador avezado de gran nivel. Un acontecimiento tan extraordinario como este sólo le podría pasar.. ¡¡al barón de Münchhausen!!
Tras este episodio el barón dejó el ajedrez una buena temporada, pero pretendió haber conseguido salvar su honor con su facilidad de palabra.
Es de remarcar el cómo el joven desconocido sólo copió de forma simétrica las jugadas que iba haciendo el barón y… consiguió ganarle sin saber ajedrez.
La calidad de las partidas es muy baja, pero es muy instructivo comprobar cómo el joven copia simétricamente sin más todos los movimientos del barón.
¿Verdad que no es difícil imaginar esta obra representada teatralmente por alumnos?, o plantear un debate en clase sobre la humildad, sobre si se puede triunfar o no siguiendo la estela de alguien, o sobre si la originalidad y la innovación siempre tienen premio.
El mérito ajedrecístico que tiene esta fábula, es la impronta del muy fuerte jugador que inventó estas partidas de nivel ajedrecístico ínfimo, pero divertidísimas siguiendo una simetría perfecta para acabar en mate… Una obra genial, sin duda.
Cuestión abierta de ajedrez para el próximo número.
Para ejercitarnos con el tablero propongo el siguiente reto que resolveremos en la próxima entrega de estos artículos.
¿Puedes colocar cinco damas en el tablero que sin atacarse entre ellas dominen todas las casillas del tablero?
Adelanto que es posible.
¿Puedes hacer un programa que resuelva esta cuestión?
Un saludo y hasta la próxima.
Enlaces:
Reglamento de ajedrez de la FIDE en español
http://feda.org/feda2k16/wp-content/uploads/Leyes-2017.pdf
Federación de ajedrez de Castilla y León
Proposición no de ley promoción del ajedrez en Castilla y León
La historia del barón contada y las partidas reproducidas si no quieres coger un tablero
Webs útiles de ajedrez
https://thezugzwangblog.com/jugar-al-ajedrez-online-gratis-las-25-mejores-webs/
https://www.ajedrezonline.com/
https://www.chess.com/es/play/computer
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