Autora: Mª Rocio Garcia de la Fuente.
Existen muchos lenguajes de programación para principiantes, dependiendo de la edad y el nivel del programador (primaria, secundaria y Bachillerato. Cómo elegir un primer lenguaje de programación es todo un desafío. Hay tantos idiomas). ¿Dónde comenzar? ¿Cómo escoger el mejor lenguaje de programación para cada necesidad?
En la actualidad hay al menos tres tipos diferenciados de lenguajes de programación:
- Imágenes o cuadros de idiomas, estos lenguajes enseñan el lenguaje de la programación y sus conceptos a través de la manipulación de imágenes. Turtle Art, Kodu pueden ser un buen ejemplo.
- Bloques de idiomas, utilizan bloques y a veces código para realizar las distintas tareas, por ejemplo, girar una imagen o hacer una imagen siga una ruta especificada. Alice, Cero, Tynker, Scratch entre otros idiomas son ejemplo de ello. Estos lenguajes son puente entre el primer tipo y los lenguajes de programación tradicionales.
- Lenguajes de programación «Real», son lo que los adultos entiende como lenguajes de programación. A menudo difíciles de entender. Se debe aprender paso a paso cómo realizar tareas y crear aplicaciones. Ejemplos como Python, PHP, Erlang, JavaScript, C++, y otros muchos que encajarían en esta categoría.
Comenzar con un lenguaje de programación no es sencillo, y no es fácil elegir correctamente. Conviene comenzar empleando lenguajes sencillos de fácil comprensión, tal y como se hace de manera reglada en los centros educativos:
- En un primer nivel, y dirigido a alumnos sin conocimientos previos, se emplean lenguajes como Scratch, o similares para aprender los conceptos básicos de programación en un entorno amigable que permita obtener resultados satisfactorios sin demasiadas complicaciones.
- En un segundo nivel, tras haber conseguido asimilar los ya citados conceptos básicos se pueden introducir lenguajes de programación formales utilizando plataformas como Processing (Java) o VBScripts (Visual Basic).
Así pues, mientras que el proceso de aprendizaje para un niño parece ir encaminado a trabajar con programas con imágenes (tipo Turtle Art), continuar con lenguajes de bloques (Scratch) para finalmente llegar a dominar lenguajes de programación reales, como Simon Haughton (Autor de “A children’s guide to Python programming”) creen que los niños pueden un aprender un lenguaje como Python si se enseña en base a conceptos claramente entendidos. De esta forma enseña a programar con Python a través de conceptos muy simples, utilizando aplicaciones fácilmente disponibles para las tabletas y teléfonos inteligentes. La evolución de idiomas imágenes simples a idiomas adultos debería ser más corta.
Hoy, sin embargo, enseñar a los niños pequeños con programas sencillos (como kodu) parece ser un buen punto de partida ideal, evolucionar luego a programas como Scratch y finalmente trabajar con programas como a Python, PHP y Javascript, C++.
Existe también programadores que movidos por motivaciones como: bien realizar una modificación de su juego favorito o crear una aplicación para su móvil o tablet, hacen sus propias investigaciones y aprenden lo que necesitan saber por el método ensayo y error. El programador eligen una plataforma de programación que se adecua a sus necesidades, a veces esto significa que Lua (Ansi C) es su primer lenguaje, aunque podría haber sido otro lenguaje orientado a la creación de juegos como Skyrim. Prueban, e instalan multitud de aplicaciones, leen documentación y así logran aprender PHP o JavaScript o bien tienen la posibilidad de que un adulto les ayuda a empezar.
Sea cual sea el lenguaje, el éxito se define como la capacidad de entender conceptos de programación y tener una idea de las fortalezas y limitaciones de cualquier idioma. Además de aprender, una parte importante radica en la diversión y recompensa que el trabajo con este tipo de lenguajes puede ofrecer a los jóvenes programadores.